Huawei: El futuro de la innovación

Cuando pensamos en el futuro de la innovación dentro de la industria de los smartphones, es muy fácil verlo desde una perspectiva de ciencia ficción. Imaginar voces hablándonos a través de pequeños auriculares, obedeciendo todas nuestras órdenes y resolviendo nuestras agendas al tiempo en que nos presentan un plan para mejorar nuestra productividad en 1000%.

Sin embargo, si todas las decepciones que hemos experimentado debido a las exageraciones de películas futuristas y décadas de ciencia ficción nos han enseñado algo, es que cuando se trata de planear o pensar en el futuro, es mucho mejor verlo desde una perspectiva orientada en las funciones que en una inspiración de trucos o “innovaciones” vacías.

Y por eso es que el último par de anuncios hechos por Huawei son muy buenas noticias para los entusiastas de la innovación y de los dispositivos móviles: el Kirin 970, como el primer Sistema en Chip (SoC por sus siglas en inglés) del mundo en integrar un procesador específicamente dedicado a la ejecución de tareas de Inteligencia Artificial (IA), la Unidad de Procesamiento de Redes Neurales (NPU por sus siglas en inglés), y la Serie Mate 10, como primeros dispositivos que hacen uso de este.

Hablemos del primero. El nuevo Kirin 970 fue presentado a nivel mundial durante IFA 2017 y fue construido con un objetivo en mente: desempeño inteligente. Huawei siempre ha trabajado para crear innovaciones significativas que satisfagan/resuelvan los “puntos de dolor” de los consumidores, especialmente el desempeño a lo largo del tiempo, la calidad fotográfica en cualquier escenario y la vida de batería incluyendo tiempos de carga.

Para resolver todos estos puntos se debe encontrar una manera de traer verdadero cómputo de IA a los smartphones, creando con esto IA Móvil que esté bien balanceada entre Inteligencia Artificial en el dispositivo e IA de Nube. El primero se encarga de mantener segura la información en el dispositivo y de proveer bajo consumo energético y respuestas oportunas a tareas de IA, al tiempo que entrega independencia al no requerir conectividad. En el lado de la Inteligencia Artificial de Nube, el procesamiento de Big Data y Deep Learning se lleva a cabo en granjas de procesamiento, entregando Conocimiento Universal.

Pero, ¿cómo podemos asegurar IA en el dispositivo? Con un SoC que tenga Cómputo de Inteligencia Artificial integrado. En el caso del Kirin 970, esto significó perfeccionar el proceso de 10nm para lograr así, una impresionante cuenta de transistores de 5.5 mil millones en aproximadamente un centímetro cuadrado.

Así, en el centro de este maravilloso SoC podemos encontrar, como sus elementos principales, un CPU de alto desempeño y 8 núcleos, un GPU de alta eficiencia y 12 núcleos, un Procesador de Señal de Imagen Dual (ISP por sus siglas en inglés) para enfoques superiores, fotografía en entornos de poca luz y detección de movimiento, un módem 4.5G Categoría 18 ultra rápido con velocidades de descarga de hasta 1.2Gbps y, por supuesto, un NPU de alto desempeño con 50 veces una mejor eficiencia energética y 25 veces mejor desempeño en tareas de IA, cuando se le compara con arquitecturas basadas en CPU o CPU+GPU.

Esta última pieza de hardware ayuda a los ingenieros de software a crear un sistema de cómputo de redes neurales, dentro del dispositivo, que es capaz de pensamiento rápido, inteligente y avanzado. Para poner esto en perspectiva, se realizó una prueba de reconocimiento de imágenes por minuto. El Kirin 970 (en el Mate 10 y Mate 10 Pro) ejecutó esta tarea (2,005 imágenes por minuto) más del doble de rápido que el iPhone 8 Plus (889 imágenes por minuto), cinco veces más rápido que el iPhone 7 Plus (487 imágenes por minuto) y más de 20 veces más rápido que el Samsung Galaxy S8 (95 imágenes por minuto).

Los resultados muestran cómo una arquitectura CPU+GPU+NPU de un chip avanzado, fácilmente supera a las básicas de CPU+GPU (iPhone 8 Plus y 7 Plus) y vuela por completo sobre arquitecturas anticuadas de CPU (Samsung Galaxy S8) cuando se trata de tareas de IA y desempeño general.

Pero, ¿cuáles son las implicaciones de uso reales de estas capacidades? ¿Qué se puede lograr con el cómputo móvil real de la actualidad? Como dijimos en un principio, el futuro se encuentra en la mejora de funcionalidades. Con el Kirin 970, existen diversos procesos que se mejoran de inmediato contra arquitecturas pasadas, como la programación de tareas, balance de cargas y ubicación de memoria, para un mejor desempeño.

Al mismo tiempo, el rendering de la Interfaz de Usuario, gráficas y procesamiento de imagen también son mejorados gracias al cómputo de IA, permitiendo a los desarrolladores traer funcionalidades de tiempo real a los smartphones como visión computacional en tiempo real, Realidad Aumentada de bajo consumo y entendimiento preciso de lenguaje.

Este nuevo chipset también permite a Huawei llevar su algoritmo de Machine Learning un paso adelante para que sus nuevos teléfonos mantengan su excepcional desempeño inclusive después de 18 meses de uso continuo. Todo esto, junto con su módem 4.5G LTE, hacen del Kirin 970, y de los Mate 10 y Mate 10 Pro, unas piezas de tecnología de punta a prueba del paso del tiempo que están preparadas para cualquier innovación que pueda aparecer en los próximos años.

La segunda aplicación más importante es la fotografía impulsada por Inteligencia Artificial. A pesar de que los esfuerzos de Huawei para traer mejor fotografía a sus smartphones, con cada lanzamiento de teléfonos insignia, han sido importantes y fuertemente impulsados por su colaboración con Leica, la Inteligencia Artificial es capaz de llevar los mismos un paso adelante.

Revisando la evolución de la fotografía en smartphones, esta fue de una cuenta elevada de megapixeles (claridad), pasando por algoritmos y procesamiento de imagen (belleza), hasta la fotografía artística (con las cámaras duales de Huawei creadas en co-ingeniería con Leica). Este camino le dio a la Serie HUAWEI P, el Premio EISA a Mejor Producto por cinco años consecutivos y, con el esquema de cámaras duales, beneficios adicionales como mapa de profundidad, zoom computacional, mejoras en la calidad de imagen y la mejor manera de asegurar que el dispositivo capte la materia prima de la fotografía: la luz.

Pero el futuro de la fotografía no se ganará solo con luz. A pesar de que la Serie Mate 10 tiene la mayor apertura dual en el mundo –f/1.6 en los dos lentes-, el combinar la cámara dual de Huawei con Inteligencia Artificial de reconocimiento de sujetos, objetos y escenas, es el siguiente paso natural en la evolución de la fotografía móvil.

Esta combinación está respaldada por miles de imágenes que ya han sido enseñadas e identificadas a y por el Kirin 970, por lo que puede reconocer 13 sujetos, objetos y escenas diferentes para poder modificar los parámetros de la cámara de manera inteligente en cada caso: retrato, atardecer, cielo azul, nieve, playa, flores, plantas, perros, gatos, comida, texto, escenario y tomas nocturnas. No se trata de fotografía automática, es fotografía inteligente. Pero ni el excelente desempeño ni la hermosa fotografía impulsados por IA significan algo si la batería del teléfono no puede seguirte el paso. Es por ello que, a lo largo de los años, Huawei ha trabajado y perfeccionado la experiencia definitiva de batería, poder inteligente.

Se trata de una combinación de hardware y software de punta que entregan la mejor vida de batería con una verdadera solución de carga rápida incluida en la caja. Los primeros dispositivos de Huawei en utilizar el Kirin 970 son los líderes definitivos de la categoría de productividad, Mate 10 y Mate 10 Pro.

Esto no solo por su batería de alta densidad de 4,000mAh (imposible de encontrar en cualquiera de los dispositivos competencia de Huawei) o por su ya comprobada y ahora certificada por TÜVRheinland (para máxima calidad y seguridad) tecnología propietaria SuperCharge, sino también por su ahorro y consumo de energía optimizados con IA y que dan a los usuarios la mejor vida de batería de la industria, punto. Nadie siquiera se acerca a las 24 horas completas de batería para usuarios demandantes o a las 48 horas para usuarios convencionales, que la Serie Mate 10 entrega.

Todas estas innovaciones y mejoras basadas en ofrecer a los usuarios las mejores experiencias de uso real con sus dispositivos no fueron decisiones tomadas de un día para otro. Son resultado de una obsesión basada en calidad e innovación que Huawei ha construido por 30 años y que, solo en los últimos 10 años, ha significado una inversión en Investigación y Desarrollo (I+D) de $45 mil millones de dólares y una red global de talento en 15 centros de I+D que la compañía tiene alrededor del mundo.

Y es con esta visión de innovación centrada en el consumidor que Huawei se ha convertido no solo en el líder de la revolución tecnológica china, sino que también se perfila para convertirse en una marca icónica de tecnología y en el líder del futuro de la innovación global en la industria de los smartphones. El Kirin 970 ya está ahí, esperando a quien sea que quiera unirse a la tendencia de la innovación significativa.