El tenista suizo se convirtió en el embajador global de la marca de chocolates Lindt, coincidiendo con el sesenta aniversario del lanzamiento de la variedad Lindor.
Es la primera vez en la historia del anunciante, que se remonta a más de 160 años, que el nombre de la empresa se asocia a un personaje público.
La cooperación entre el tenista y la marca, plasmada en un acuerdo suscrito entre Federer y Lindt & Sprüngli, propietaria de Lindt, “se usará como herramienta de comunicación y RRPP adicional a los esfuerzos de marketing a escala global”, según un comunicado difundido por la marca suiza. Hasta ahora su comunicación estaba basada en los llamados Maestros Chocolateros de Lindt.
Según la firma, el actual número 1 del tenis es el prescriptor perfecto para Lindt & Sprüngli porque representa los mismos valores: “Suizo”, “Premium”, “Calidad” y “Pasión».