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Por Alicia Vidal
A medida que pasan estos días de confinamiento y distanciamiento social impuestos por la Pandemia del Coronavirus, me resulta muy inspirador aludir a las cartas del Tarot, tal como lo hice en anteriores publicaciones refiriendo a la figura de El Colgado y luego a La Torre.
Comparto aquí en formato podcast la lectura del capítulo referido a la Templanza de mi libro «Del Loco al Héroe: la Ventura del Tarot»
La Templanza refiere a tener temple, y tener paciencia y su figura nos remite al imaginario de un ángel que está allí para acompañarnos en un proceso difícil.
Entiendo que esta es la figura que hoy nos puede inspirar para traspasar estos días, así como ella trasvasa los líquidos de un envase al otro, provocando cierta «alquimia» que permite superar procesos. Es confianza y equilibrio, es armonía, fluidez y tranquilidad…
Una vez más el lenguaje simbólico al que apela el juego del Tarot sirve de referencia para los tiempos de la humanidad.
Este es un pequeño fragmento del capítulo que compartí en Instagram con una serie de figuras que representan La Templanza según diversos mazos de cartas.
https://www.instagram.com/p/B–wzQBg7kr/
Y aquí comparto una sección del texto y luego el audio en formato audiolibro.
La Templanza es un ángel posado sobre la Tierra y así nos inspira con su ejemplo. Trasvasa un fluido entre dos recipientes con habilidad y esto supone un significado más profundo y trascendente que el simple ir y venir de líquidos.
Representa la presencia de polaridades que ella logra equilibrar con armonía y sin sobresaltos. Con su gesto nos brinda confianza. A la gran convulsión que experimentó el héroe al verse detenido y al sufrir un proceso inevitable de transformación, le sobreviene un momento de tranquilidad. La Templanza tiene el temple justo.
Luego del Diluvio se presenta el Arco Iris, como un signo de renovación y esperanza. A partir de instalarse en este remanso de paz, surge la oportunidad de iniciar una nueva etapa. Tras la metamorfosis el arcano propone renacer de un modo pleno.
Este arquetipo invita a que nuestra paciencia tome un rol protagónico, nos estimula a dejarnos llevar por el fluir del destino sin oponer resistencias. Actúa como una ayuda y guía haciendo circular nuestros pensamientos, pasiones, energías y acciones, tanto en el plano de lo consciente como de lo inconsciente.
Así, logra reconciliar aspectos supuestamente contrapuestos. Con actitud paciente y compasiva nos brinda protección en un equilibrio alejado de las fuertes emociones y la pura racionalidad. Potencia en nosotros una sensación de expansión y evolución. Es una manera de abrirnos hacia corrientes profundas y trascendentes de la vida.
Templar el carácter es facilitar que se concilien materia y espíritu sin interferir con nuevas combinaciones que sirven para pavimentar nuestro camino de individuación. Toparse con este arcano en el camino es como encontrarse con el ángel de la guarda que nos protege, nos apoya, nos brinda confianza y fe.
Preciosa interpretación. Gracias. Saludos cordiales.